La verdad es bien difícil recuperar créditos cuando el deudor no paga y no tiene bienes susceptibles de embargar, aunado a eso el nuevo código procesal civil y mercantil es bastante favorable a este tipo de deudores con lo que se incentiva la cultura de no pago.
Yo he conocido un par de casos que han prosperado con la figura de la estafa, en casos donde se han dado garantías de bienes muebles que el deudor las desaparece o las vende intencionalmente, en casos en que es una red de falsificadores de documentos, etc; es bien complejo probar el dolo para que prospere penalmente.
Hoy en día es recomendable aconsejar a los clientes que le pidan garantía hipotecaria o prendaria inscrita para evitar perder el dinero; o en su caso solicitarles fiadores que sí tengan bienes o solvencia económica para que se puedan ejecutar, de lo contrario se estarían dando crédito a ciegas y lo peor del caso es que el cliente quiere pagarle a uno contra resultado de las diligencias.